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articulo de analisis



Modernidad versus
Postmodernidad en China
El debate entre los “valores asiáticos”
Y los “valores universales”

SEÁN GOLDEN.
Existe una confrontación entre el imaginario occidental, representado por los Estados Unidos de América y una gran parte de los países del continente europeo frente al imaginario oriental, cual se niega a formar parte del unilateralismo de los EE.UU constituido posteriormente a la guerra fría, la República Popular China ha tendido a configurar una posmodernidad como propuesta alternativa a la óptica occidental.
Los valores occidentales que tienden a alcanzar una cobertura de carácter universal son disidentes respecto a los valores y concepciones filosóficas de los habitantes asiáticos, por consiguiente los pensadores del continente asiático empiezan a implementar un nuevo ideario alternativo a la filosofía occidental para configurar una reivindicación de la postmodernidad, de esa forma se lograría una consolidación filosófica y política para anteponerse al imperialismo y el neoimperialismo económico que se han convertido en la bandera de representación europea y Estados Unidos, la cual busca crear una política geoestratégica para darle origen al nuevo orden mundial, que como lo han mencionado una cantidad importante de pensadores, es muy probable que conduzca a la humanidad a lo que Samuel P. Huntington, denomino el choque de las civilizaciones. Como antes se había aludió, los EE.UU en alianza con la Unión Europea, tratan de seguir el ejemplo de los planteamientos de la ilustración para instaurar los que ellos conocen como los valores universales que se puede alcanzar logrando previamente un unilateralismo en los ámbitos: políticos, económicos, culturales, religiosos, etc.
Sin embargo los gobiernos de oriente y los pensadores de los países que reciben el nombre de orientales o asiáticos, han logrado reconstruir sus propios valores constituidos a lo largo de su historia, para poder resistir unificadamente en contra del unilateralismo o los valores universales, para proponer un multilateralismo como alternativo para los pueblos que no son incluidos dentro de los países occidentales como los del continente asiático y del continente africano, de esa manera evitan la justificación del imperialismo en sus territorios y contradicen el contenido idealista del mismo.
Se habla de unas discrepancias profundas entre los Estados Unidos y la Unión Europea acerca de la manera como de bebe estructurar el orden mundial, pensadores de la talla de Robert Kagan, decidió citar a Thomas Hobbes para justificar la visión Estadounidense del mundo como peligroso, desordenado y por ende la necesidad de que un poder o Estado superior interviniera constante mente en ese escenario caótico, también citaba a Inmanuel Kant para justificar la visión europea de un mundo que podría regirse de una manera racional, por parte de EE,UU y la UE, Kagan como Fukuyama compartían los ideales de la visión universal y unilateral en lo que incumbe a la democracia liberal y el mercado libre y por consiguiente debía ser un axioma que dichos principios de exigieran a todas las otras culturas del mundo, que además eran modelos sustentados en la doctrina neoconservadora del modelo político actual de los Estados Unidos, pero el implementar esa doctrina repercutirían en un choque de civilizaciones, ya que la respuesta de China y demás países asiáticos concordarían una defensa a sus valores alternativos obstaculizando la pretensión de universalidad de Occidente, como constituyéndose dichos países en una gran amenaza para la ejecución de sus ideales emanados de la ilustración.
Por otro lado hay que resaltar que si en el manejo del discurso occidental se habla de una confrontación entre Estados Unidos y la Unión Europea, desde la visión oriental se habla de una teorías geoestratégicas de los EEUU y U.E, consolidados en la OTAN bajo el principio del concepto de la Guerra y contención del comunismo como una estrategia esencial para la eliminación sistemática del enemigo o de los que se levantan en su contra, es importante subrayar que varios pensadores norteamericanos han discurrido sobre la idea de una China como un futuro enemigo inevitable para los Estados Unidos . Con lo que se manifiesta la intolerancia de la filosofía occidental para aceptar la diversidad de los valores culturales y de etnodiversidad, un literato destaco en estos aspectos es el judío Edward Said que afirma lo antes mencionado en su libro Orientalismo.
La modernidad se ha catalogado como un proceso mediante el que se consolida el sistema capitalista y la democracia liberal, dentro de esa discusión se enmarca que el motor ideológico de dicha modernidad que es altamente cuestionada tiene sus raíces en la herencia filosófica de la ilustración, pero es elemental destacar que a la ilustración la aporto también las filosofías de China, esa afirmación de sustenta por la presencia de los jesuitas en Beijing que abrió las puertas de un intercambio cultural en el siglo XVI, de suma importancia tanto para China como para Europa, los jesuitas tradujeron al latín las obras canonícas del confucianismo y las difundieron en Europa, con el que también sirvió a pensadores para inventar el concepto de déspota, libros como el arte de la guerra de Sunzi fue leído por Napoleón, pero luego se fragmento el puente intercultural creado por los jesuitas y se entro a una esfera de vacío en las relaciones entre Europa y China.

Se inicio la época de las primeras agresiones de los imperialistas quienes ensimismados por el opio importado de China no tomaban medidas en la violación de los derechos humanos y la dignidad del pueblo, solo se encaminaron sin presentes a la explotación y la gran transformación hacia el capitalismo imperialista es decir la elogiada modernidad en la concepción de la cultura y los valores occidentales. Lamentable es el hecho de que la modernidad europea se introdujo en China por la fuerza de las armas, usando el cinismo de la sangre y el fuego para anteponerse a la cultura del pueblo mandarín o chino. China perdió dos guerras llamadas del opio contra el Reino Unido y Francia, en una eventual guerra contra el Japón China perdió centenares de combatientes y de esa forma se sintió humillado el país, a principios del siglo XX, China experimento una revolución republicana que derroco la ultima dinastía en 1912, a principios de los años treinta empezó la invasión japonesa, que duraría hasta el final de la segunda guerra mundial en 1945. No obstante el pueblo Chino siguió sometido a la guerra y los cambios de poder ya que en 1949 Mao Ze Dong proclamó la creación de la República Popular China, en la década de los años 50 China lucharon contra los EE.UU en Corea, con una gran pérdida de vidas, se suscitaron tensiones bélicas con Taiwán, en esa misma década China no acepto la hegemonía de la Unión Soviética en el ámbito comunista y provoco una traumática ruptura a finales de los años cincuenta.
Después de la muerte de Mao en los 70, desapareció el fondo ideológico del partido comunista Chino que acordaba la militancia de capitalistas pero no su afán de controlar de manera centralizada la evolución de la economía y la política de la sociedad. Pensadores de la ilustración como Thomas Jefferson, Thomas Paine, John Stuart Mill y Karl Marx, abogaron por la creación de una civilización mundial en el que las variadas tradiciones y culturas del pasado quedaran superadas por una comunidad nueva y basada en la universalidad basada en la razón.
Pero como se había anotado antes, el interés de instaurar la postmodernidad en China, supone una resistencia multilateral a la tendencia unilateralista que marca el capitalismo global señalado en el consenso de Washington y la nueva doctrina geoestratégica de la administración Bush en los Estados Unidos la ideología de este ultimo leda una grado perentorio al individuo a consta de la comunidad, los Norteamericanos creen que sus principios valorativos son seres universales.
Los pensadores chinos pueden elaborar su crítica de la modernidad y su propuesta de la postmodernidad con más confianza en sí mismos. Para muchos pensadores chinos, China debería modernizarse sin pasar por la modernidad occidental. En nuestros tiempos, el capitalismo de los países postcomunistas con tradición religiosa ortodoxa será diferente al de cualquier país “occidental”. Por otro lado es elemental tener en cuenta que el nacionalismo chino podría convertirse en uno de los factores geopolíticos más importantes de este nuevo siglo.
La defensa china de un sistema de valores alternativo al sistema predicado por las antiguas metrópolis occidentales debe ser un elemento de contrapeso igualmente importante para el futuro de este nuevo siglo.

BIBLIOGRAFIA:

GOLDEN, Seán (2003). Modernidad versus postmodernidad en China.
El debate entre los “valores asiáticos” y los “valores universales”. Revista, CIDOB.N:63_Pag.9, 32.Consultado el 5 de junio del 2010 en:
http://www.cidob.org/es/publicaciones/revistas/revista_cidob_d_afers_internacionals/num_63_la_nueva_china.